El grito de Munch
¡OH! Manos divinas e incomprendidas
¿Por qué pintas tu grito?
Si nadie supo nunca escucharlo
Si nadie entendió de tus tormentos
Si naciste condenado a tu "Yo" y a tu propio tiempo,
porque dolorosa fue tu vida
desde antes de tu nacimiento.
¡Pobre niño!
Tus gritos viajan por el mundo
exhibiendo desesperación ,
que hoy tiene precio
¿Con qué derecho?
Pobre victima fatal de cruel destino…
Gritas y gritas
más nadie muestra compasión
¡OH! Manos divinas
marcadas por estigmas
¿Cuántos ángeles negros
rodearon y mecieron tu cuna?
Adornada de rasos y tules
tejidos de angustias,
de sangre y de sombras.
¡OH! Manos divinas cuánto amor
se desprendió de los pinceles
cuando tu bella Sofi moría…
¿Cómo podrías no gritar?
Cuando lograste plasmar
el rostro de la muerte
que pacientemente reposaba
sobre la cabeza de tu hermana.
¡Pobre niño viejo!
Envuelto en locura y delirios de embriaguez.
¿Cómo podrías dejar de gritar?
Si pintaste una y mil veces
el rostro de tu madre
desfalleciendo de dolor.
Tu grito hoy retumba…
Golpea su eco en mis oídos
mientras contemplo los colores
del cielo y del infierno.
¡OH! Manos divinas
¿Qué gritaba él?
Cuando en primavera
miraba la cara de la muerte
escondida tras la ventana.
¿Qué gritaba él?
Cuando la razón se escapaba
de otra de sus rosas
dejándola quieta,
extraviada en su locura…
Contemplando mil demonios
danza frenética en su estancia.
¡OH! Manos divinas
Dejaste tu historia plasmada
en un grito.
Todos los seres que amaste,
todos tus demonios,
y febriles divagaciones
yacen escondidas en cada uno de sus trazos.
Todos permanecen impasibles.
Todo parece aburrido
pero tu estas gritando…
Mientras el mundo gira y gira
el pasado viene y va
en dos pequeñas balsas navegando al Estigma.
Dos manos te cogen de los hombros
pero tú sigues gritando
Pasiones…
Miedos…
Ausencias…
¡OH! Manos divinas
Temblorosas en tus delirios…
Pintaste tu historia en un grito,
enredada entre los cabellos amados.
Solo deseo preguntarte niño viejo
¿Por qué si ya sé del motivo de tus gritos,
tapas tus oídos?
Sé bien que no soportas el silencio,
ni el encierro…
Te desgarras
pero gritas mientras tapas tus oídos..
¿ Es acaso que gritas
para no escuchar tu propia voz?
JEM WONG